
palabras y hierbas entre las espigas de trigo para los arándanos de escape en la carretera acurrucarse como la nieve en primavera en el jeep de la reconquista. Bajo un cielo inmenso con pequeños penachos blancos y rojos susurró las iniciales con los ojos abiertos sabe a metal debajo de la lengua tales guijarros revueltos en el extremo de un palo. El acantilado colgando vendó las garras del mar en los guijarros de la playa notas tiernas al alcance de las sonrisas negociados como gaviotas parlanchinas recogiendo los festones cubiertos de musgo. Encaramado en las tablas más altas cuadernos de ayer fueron las conchas de nuestra biblioteca sentencias suspendidas de nuestros padres y madres lavar al niño con una onza de "sent-bon". Aplaudir los granizos en el vaso de los santos de hielo claro de larga vida abriendo a quien mejor los párpados de nuestros miedos arcaicos que ningún hombre puede domar. Bofetadas y ampollas por el regreso de los olvidados en cohorte inquietante sobre el aire de un carrete encendiendo bocanadas de feromonas de un pensamiento despierto. Bajo la tienda té caliente y dulce listas de tontos de edad propicio para huir a las vetas del oriente campanas de emergencia cegadoras de nuestra búsqueda de seguridad. 800