De alegría por esta blancura a gran altura él iba sandalias cansadas brazos colgando la casquette de traverspor el camino hacia el río encontrar su amigo el capitán el rey pescador el amante fraterno individual luces francos en la orilla con violetas esparcidas en apertura del cielo árboles caras mi amigo el poeta borracho de realidad frágil en su andar sensible al inmenso dolor portador de esperanza asegurando imperturbable la fraternidad cuestión de no infringir su papel hacedor de sueños con estas figuritas fuera de la bolsa muñecas de carne y espíritu como tantos espejos dispuestos en el banco de madera cortesía de nuestra reunión donde despejar vienes de la playa yo noches solitarias convencido transmitir nuestros valores sin hacer conejillos de indias frente a nuestra casa el mundo a quien tanto le debíamos lun la demanda de amor el otro el regalo del corazón. 524