Camina por el amanecer    
perderse en el naufragio de los instintos    
este es el dilema    
labios ofrecidos a quien quiera tomarlos    
fuera de las sábanas 
agacharse    
hacia el amado de los prados    
    la mariquita    
ciruela mirabel    
de la campana de la iglesia    
llamando a la urgencia de la oración    
Sin obligación    
sin intención    
el fruto colgando de la hoja sedosa    
cazo chirriante    
sobre el agua temblorosa    
cuidado con el estremecimiento    
arce    
rostro sabio    
de la búsqueda sensible    
razón singular    
de paz y alegría    
nudillo de bistorta    
espelta    
todas las noches lánguidamente    
hacia esta mano delgada    
hacia esta mano extendida    
entregado    
en las ricas horas    
galas blancas    
contenido    
más cerca del corazón.        
 
 
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